La Corona de Adviento es una de las tradiciones más arraigadas en la Iglesia Católica, especialmente en México. Se trata de un elemento decorativo que además tiene una profunda carga simbólica.
En un mundo lleno de incertidumbres, la Corona de Adviento nos invita a reflexionar sobre la esperanza que nos brinda Jesucristo; la luz que ilumina nuestros caminos, y la guía que necesitamos en tiempos de oscuridad.
La Corona de Adviento se compone de cuatro velas que representan cada una de las cuatro semanas del Adviento. Cada vela simboliza un valor que debemos cultivar en nuestro interior para prepararnos adecuadamente para la venida del Señor: la esperanza, la fe, la alegría y la paz.
En este artículo, nos enfocaremos en la primera vela: la vela de la esperanza. Compartiremos contigo una oración para Corona de Adviento 2019, que puedes hacer en familia o en soledad, para meditar sobre la grandeza de este primer valor.
Oración para Corona de Adviento 2019
Padre eterno, hoy te pedimos que nos concedas el don de la esperanza. Sabemos que en ocasiones puede resultar difícil mantener la ilusión cuando todo parece ir en contra, pero también sabemos que tu misericordia es infinita.
Te pedimos que mantengas nuestras mentes y nuestros corazones en paz, para que podamos comprender que aunque las cosas no siempre salen como queremos, cuentan con un propósito mayor. Queremos mirar el futuro con optimismo, convencidos de que tu amor nos guía por senderos seguros.
Te pedimos que enciendas nuestra vela de la esperanza, que brille con fuerza sobre nuestras vidas y las de nuestros seres queridos. Que esta luz nos dé fuerzas para superar nuestros miedos, nuestras penas y nuestras dificultades, y que nos aliente a compartir con otros la alegría de este tiempo de preparación.
Que la Corona de Adviento sea para nosotros una señal clara de que aún en las noches más oscuras, tu amor y tu verdad se mantienen firmes. Que en este Adviento, podamos avanzar firmemente hacia a ti, apoyados en la mano de tu Hijo Jesucristo, quien es la luz del mundo y la esperanza de todas las naciones.
Esta oración para Corona de Adviento 2019 es una oportunidad para reflexionar sobre el verdadero significado de la fe. En un mundo que a veces parece perder el rumbo, necesitamos mantener la luz de la esperanza encendida en nuestros corazones, y cultivar una actitud de optimismo frente a los desafíos que nos presenta la vida.
La Corona de Adviento es una forma sencilla y hermosa de recordar a nuestra familia que la navidad no es solo una época de dar y recibir obsequios, sino una oportunidad para estar más cerca del Señor. Además, es una herramienta que nos ayuda a cultivar valores que harán de nosotros personas más fuertes y más respetuosas del prójimo.
Esperamos que hayas encontrado en esta oración para Corona de Adviento 2019 esa paz interior que necesitas para enfrentar los próximos días con energía y serenidad. Te invitamos a que en siguientes días de Adviento sigas orando y reflexionando sobre los demás valores representados por las velas de la Corona.
Recuerda que la Luz que nos dio Jesús no sólo ilumina el mundo, sino también nuestros corazones. ¡No dejes que se apague este fuego!
Ten fe y recuerda que quien espera en Dios, siempre será recompensado con creces. Una oración para Corona de Adviento 2019 puede ser el primer paso para encontrar esa luz que nos guía en los momentos más difíciles.
¡Que la esperanza siga brillando en tu corazón, ahora y siempre!
¿Qué oración se reza el primer día de Adviento?
El Adviento es un tiempo de espera y preparación para la celebración del nacimiento de Jesucristo en Navidad, un momento de reflexión y oración que dura cuatro domingos. Hablando específicamente del primer día de Adviento, es importante conocer la oración que se reza en esta ocasión de manera especial.
La oración del primer domingo de Adviento es una súplica por la esperanza y el amor en nuestros corazones. Esta oración se centra en la necesidad de estar vigilantes, de mantener nuestros corazones abiertos al amor y a la gracia de Dios mientras esperamos la llegada del Mesías en Navidad. Es una oportunidad para prepararnos espiritualmente para la Navidad, cultivando una actitud de esperanza y gratitud en nuestras vidas.
Entre las oraciones que se pueden rezar el primer domingo de Adviento, se encuentra la siguiente:
“Señor, tú que nos conoces mejor que nosotros mismos, ayúdanos a estar a la altura de la tarea que nos has confiado. Danos un corazón vigilante, lleno de esperanza y amor, que esté siempre dispuesto a acoger a Cristo en nuestras vidas y en el mundo. Amén.”
Esta oración es una llamada a la reflexión y a la acción. Nos exhorta a estar alertas y preparados para recibir al Salvador, al tiempo que nos anima a mantener un corazón lleno de amor y esperanza. Es una invitación a que abracemos con entusiasmo el espíritu del Adviento y que nos dejemos transformar por la gracia.
El Adviento es una época en la que se nos invita a profundizar en nuestra relación con Dios y a acercarnos más a Él. La oración, por tanto, es un elemento clave de este tiempo, y es importante que dediquemos un espacio en nuestro día para la oración y la meditación.
En el segundo domingo de Adviento, se reza una oración para pedir a Dios que prepare nuestros corazones para la llegada del Señor, para que podamos escuchar Su Palabra y seguir Sus enseñanzas en nuestras vidas.
“Señor, envíanos a tu Espíritu Santo para que prepare nuestros corazones para recibir a Jesús en nuestras vidas. Ayúdanos a escuchar tu Palabra, a seguir tus enseñanzas y a ser fieles a tu voluntad. Amén.”
Como podemos ver, se nota una clara diferencia en la intención y el tono de la oración para el primer y segundo domingo en el Adviento, aunque comparten los mismos objetivos de preparación y espera.
El tercer domingo es conocido como Domingo de Gaudete, y en él se reza una oración que nos recuerda la luz de Cristo en medio de la oscuridad del mundo. Se trata de una oración que nos invita a ser testigos de la Luz y a glorificar al Padre por la venida del Salvador.
“Padre de misericordia, somos pecadores y necesitamos de tu sabiduría y de tu gracia para vivir como auténticos discípulos de Jesús. Ayúdanos a ser fieles testigos de la Luz en el mundo, y a glorificarte a ti y al Hijo por la venida del Salvador. Amén.”
Finalmente, el cuarto y último domingo de Adviento se reza una oración que nos invita a la humildad y nos anima a acoger a Jesús en nuestras vidas, como lo hizo María, la madre de Jesús.
“Dios de amor y de misericordia, como lo hizo María, ayúdanos a darnos cuenta de nuestra pequeñez y a ser humildes en nuestro servicio a los demás. Danos la gracia de acoger a Jesús en nuestras vidas con humildad y disposición, para que podamos transmitir Su amor y Su paz al mundo entero. Amén.”
En vista de lo anterior, la oración que se reza el primer día de Adviento se enfoca en la importancia de mantener nuestros corazones abiertos a la esperanza y el amor mientras esperamos la llegada del Salvador en Navidad. Es una oportunidad para prepararnos espiritualmente para la Navidad, cultivando una actitud de esperanza y gratitud en nuestras vidas. A lo largo de los cuatro domingos del Adviento, las oraciones se enfocan en diferentes aspectos de nuestra preparación para la Navidad, pero todas tienen la misma meta de acercarnos al amor de Dios y al nacimiento de nuestro Salvador.
¿Cómo rezar la Corona de Adviento en familia?
El Adviento es un tiempo importante en la tradición litúrgica cristiana, sin embargo, muchas veces se pierde entre las celebraciones de Acción de Gracias y Navidad. Este tiempo de preparación para la llegada de Jesús nos invita a reflexionar, orar y vivir con esperanza. En familia, podemos celebrar el Adviento de una manera especial y significativa, centrando nuestra atención en la corona de Adviento.
La corona de Adviento es un símbolo importante de este tiempo. Tiene cuatro velas que representan las cuatro semanas del Adviento, y encenderlas nos recuerda que Jesús es la luz del mundo. Se sugiere encender las velas y hacer una oración en familia cada domingo del Adviento. Esto puede ser una manera maravillosa de prepararnos para la Navidad y recordar el verdadero significado de esta festividad.
Para comenzar a rezar la Corona de Adviento en familia, es necesario tener una corona. Puedes comprar una en una tienda religiosa o hacerla en casa con ramas verdes, una base redonda y velas moradas y rosadas. Una vez que tengas tu corona de Adviento lista, puedes comenzar.
Primer domingo de Adviento: encienda la vela morada que representa la esperanza. A continuación, lee el pasaje bíblico que se relacione con el significado de la vela. Después, los miembros de la familia pueden ofrecer oraciones de agradecimiento y pedidos a Dios mientras se mantiene la vela encendida. También pueden cantar una canción de Adviento para concluir.
Segundo domingo de Adviento: encienda la vela morada que representa la paz. Lee el pasaje bíblico que se relacione con el significado de la vela. Después, haz una oración que refleje la necesidad del mundo de paz. Ofrécele a Dios las situaciones en las que necesitas su paz; luego canta otra canción de Adviento para concluir.
Tercer domingo de Adviento: encienda la vela rosa que significa alegría. Un miembro de la familia puede leer el pasaje bíblico relacionado con la vela. Después, reflexiona sobre cómo Dios nos da razones para alegrarnos. Haz una oración de agradecimiento por esas razones y canta una canción de Adviento feliz en conclusión.
Cuarto domingo de Adviento: encienda la segunda vela morada que simboliza la amor. Lee el pasaje bíblico relacionado con el significado de la vela y piensa en el amor de Dios por nosotros. Ofrece una oración de gratitud por este amor y canta una canción de Adviento para concluir esta celebración.
La corona puede permanecer encendida durante toda la semana como un recordatorio de la luz y esperanza que Jesús nos trae. Además, es posible realizar otras actividades que involucren el uso de la corona de Adviento en familia, como cantar villancicos, leer historias de Navidad, reflexionar sobre el significado de la festividad, entre otras.
Finalmente, se sugiere escribir una oración de agradecimiento a Jesús al final del Adviento y compartir una merienda en familia. Tomarse el tiempo para reflexionar juntos en la Corona de Adviento durante este tiempo de preparación puede ser una manera maravillosa de vivir con intención y esperanza mientras nos acercamos a la Navidad.
Disfruten el Adviento en familia, recordando que Jesús es la luz del mundo y que nos invita a vivir con esperanza y alegría. ¡Feliz Adviento!