Las salutaciones en la Biblia eran una forma de mostrar respeto y afecto hacia otra persona. Tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento, las personas utilizaban diferentes palabras y gestos para saludar a sus conocidos, amigos y familiares.
Gestos de salutación:
Además de las palabras, se utilizaban gestos para expresar el saludo a otra persona. Se acostumbraba la reverencia o postración, el besar la mano, el arrodillarse, el caer sobre el cuello de otro o el abrazarse. También se habla del beso en la mejilla como una señal de familiaridad.
Trato epistolar:
En la correspondencia se acostumbraba comenzar y terminar las cartas con saludos y bendiciones. Las fórmulas utilizadas eran variadas, como “saludad” o “paz a vosotros”. Los saludos en las cartas servían también para identificar al remitente y al destinatario. Por ejemplo, el apóstol Pablo solía iniciar sus cartas con “Pablo, apóstol de Jesucristo”.
En algunos casos, las salutaciones podían ser prohibidas. Cuando Jesús envió a los 70, les prohibió saludar a nadie por el camino. Este hecho demuestra que las salutaciones no eran sólo una forma de cortesía, sino que también podían tener un propósito específico y práctico.
Por añadidura, las salutaciones en la Biblia eran una forma de expresar respeto y afecto hacia otra persona. Tanto las palabras como los gestos utilizados variaban según la época y la cultura. En la correspondencia epistolar, los saludos servían también como una forma de identificación. Sin embargo, en algunos casos podían ser prohibidos por motivos prácticos.
Significado de las palabras de salutación en la Biblia y su relación con la cultura judía
Las salutaciones en la Biblia eran variadas y podían incluir no solo palabras sino también gestos. Entre las más comunes se encontraban la reverencia, la postración, el beso y el abrazo. Estas salutaciones no solo eran un signo de amistad y respeto, sino también una forma de reconocer la presencia de Dios y de expresar la unidad de la comunidad.
El beso en la cultura bíblica era un saludo común y una muestra de afecto entre familiares y amigos cercanos. Sin embargo, también podía tener un significado simbólico más profundo, como el beso de paz que se daba en muestra de cariño y amistad. Por otro lado, el beso de Judas encubría traición y se utiliza hasta hoy como un ejemplo de hipocresía.
En la comunidad cristiana primitiva, la salutación no era solo un gesto de amabilidad sino una forma de expresar el amor fraterno y la unidad en la fe. Los saludos eran considerados una manifestación de la presencia de Cristo y de la comunión de la comunidad. En la Biblia, también se habla de la importancia de las palabras y acciones adecuadas al saludar, lo que nos enseña sobre la importancia de la comunicación efectiva y el respeto hacia los demás en diferentes situaciones.
En la Biblia se mencionan diferentes personajes relevantes en relación al tema de las salutaciones, como Labán, Jacob, Moisés, Aarón, David y Rut. Además, se habla de entidades como los fariseos y los soldados romanos en relación a las costumbres de saludos. Palabras y frases comunes en la salutación bíblica incluyen “Dios tenga misericordia de ti“, “Jehovah sea con vosotros”, “Paz a vosotros”, “aspazomai” y “shalom”.