Las guedejas son mencionadas en varios pasajes de la Biblia, como en Jueces 16:13 y 16:19, Cantares 4:1, Isaías 47:2 y Ezequiel 8:3. La palabra hace alusión a mechones largos de cabello que suelen ir trenzados. En todos los contextos bíblicos, las guedejas son una metáfora del poder y la fuerza.
Significado bíblico de las guedejas
El significado de las guedejas en la Biblia tiene diferentes connotaciones. En el caso de Jueces, se habla de la historia de Sansón, quien tenía siete guedejas que representaban su fuerza. Al mismo tiempo, eran un símbolo de su votonazareo, que Sansón rompió reiteradamente. En Cantares, se menciona el cabello de la amada en forma de guedejas. En Isaías, las guedejas se asocian con el juicio sobre Babilonia, y en Ezequiel con las visiones del profeta sobre las abominaciones en Jerusalén.
Sansón y sus guedejas
Sansón fue un personaje bíblico con siete guedejas como emblema de su gran fuerza. Sin embargo, fue un hombre débil que se dejó vencer emocionalmente por sus mujeres, lo que le llevó a tomar decisiones erradas. Su historia es un claro ejemplo de la importancia de mantenerse fiel a los designios de Dios. Cuando Dalila traicionó a Sansón cortándole las siete guedejas de su cabello, perdió su fuerza y su vida fue arruinada.
El voto nazareo
El voto nazareo era una promesa que alguien hacía a Dios para dedicarse a Él por un tiempo determinado. En el caso de Sansón, sus siete guedejas simbolizaban su voto nazareo, el cual rompió varias veces. Los nazareos debían abstenerse de ciertas cosas, como no tocar un cadáver, no beber vino ni cortarse el cabello. Cuando Sansón rompió su voto, perdió todo su poder.
Significado simbólico de las guedejas en la Biblia
En la historia de Sansón, las guedejas juegan un papel importante. Él tenía siete de ellas en su cabeza, cada una representando algo que era necesario que Dios cortara en su vida. Estas guedejas simbolizaban su fuerza, su orgullo, su desobediencia al voto nazareo, su impureza sexual, su falta de comunión con Dios, su pérdida de discernimiento espiritual y su debilidad ante la tentación de Dalila.
El voto nazareo que Sansón tenía como nazareo decía que no podía tocar nada inmundo, nada muerto o putrefacto, ni tomar vino. Pero en varias ocasiones, Sansón violó este voto. Tomó mujer de entre los filisteos, participó en las prácticas de los filisteos que violaban el voto nazareo y se acostó con una mujer ramera. Sorprendentemente, el hombre que tenía la unción, aquel que Dios levantó para que defendiera a su nación, se contaminó de esta manera.
Sansón perdió su comunión con Dios y en su lugar, su comunión era con Dalila. Si hubiese doblado rodillas ante el Señor y hubiera buscado su presencia las cosas hubieran sido diferentes. Pero Sansón fue cometiendo un pecado tras otro y esto lo condujo a perder el discernimiento espiritual. Por eso, Dalila jugaba y hacía lo que quería con él porque no había en él discernimiento de lo bueno y lo malo.
Dalila presionó cada día a Sansón con sus palabras e importunándolo, hasta que su alma fue reducida a mortal angustia. La debilidad de Sansón fue evidente ante la tentación de Dalila, que le llevó a traicionar su unión con Dios. Al final, ella cortó sus siete guedejas y entregó a Sansón a los filisteos, quienes lo torturaron y lo cegaron. Sansón perdió su fuerza y su vida, pero su historia sirve como una advertencia para todos nosotros, de cómo podemos ser tentados y caer si no nos mantenemos firmes en nuestra fe.