Gedeón es uno de los jueces más importantes en la historia bíblica de Israel. Nacido en la tribu de Manasés, se convirtió en el líder del pueblo elegido por Dios para liberarlos de los ataques madianitas. Los madianitas eran un pueblo de comerciantes nómadas que se encontraban en constante conflicto con los israelitas, y habían atacado a Israel. Entonces, Dios eligió a Gedeón para liderar al ejército y derrotar a los madianitas.
En su misión, Gedeón recibió la ayuda del ángel del Señor y de un profeta enviado por Dios para recordar al pueblo su lealtad hacia el único Dios verdadero. También destruyó el altar que los madianitas habían erigido a Baal y construyó uno para Dios. Debido a esto, Gedeón recibió el nombre de Jerobaal.
En la batalla contra los madianitas, Gedeón utilizó tácticas inusuales que sorprendieron al enemigo, como dividir su ejército en tres grupos y hacerlos atacar desde diferentes direcciones. Gracias a esto, logró derrotar al enemigo con un pequeño ejército de 300 hombres.
Después de la batalla, Gedeón pidió a las tropas que contribuyeran con el oro del botín de guerra para crear un efod, un objeto ceremonial utilizado en la adoración a Dios. Sin embargo, el pueblo comenzó a adorarlo como si fuera un ídolo, lo cual disgustó a Gedeón. A pesar de este fracaso, Gedeón fue recordado como uno de los grandes líderes de Israel, que confió en Dios y cumplió su misión con valentía y sabiduría.
¿Cómo fue el llamado de Dios a Gedeón y cuál fue su misión según la biblia?
Según la biblia, los Madianitas oprimieron a los hijos de Israel durante siete años, robando sus cosechas y ganado, lo que llevó a la pobreza y la humillación del pueblo. Los Israelitas claman a Dios pidiéndole ayuda y es allí donde comienza la historia de Gedeón.
La opresión de los Madianitas
Los Madianitas eran un grupo de personas que vivían hacia el oriente, más allá de los desiertos, y que habían sido contratados por los amalecitas para oprimir a los hijos de Israel. Durante siete años invadieron el territorio israelita, destruyendo sus cosechas y quitándoles sus ganados, llevando a los israelitas a la pobreza y la humillación.
El llamado de Dios a Gedeón
Dios se le apareció a Gedeón en forma de un ángel y le dijo que él era un hombre valiente y que estaba con él. Dios le pide a Gedeón que libere al pueblo de Israel de los Madianitas. Sin embargo, Gedeón no estaba muy convencido y pidió una señal. Dios le dijo que pusiera carne y pan dentro de una roca y luego salió fuego de la roca y consumió la carne y el pan. A partir de ese momento, Gedeón creyó que era verdaderamente la voluntad de Dios que liderara la lucha contra los opresores Madianitas.
La desobediencia de Israel y la teofanía
El profeta enviado por Dios les recordó a los hijos de Israel que su opresión era el resultado de su desobediencia a Dios. Dios envió un ángel a Gedeón en forma humana, también conocido como teofanía. La aparición del ángel es una muestra del amor y la misericordia de Dios hacia su pueblo, así como una profecía de la llegada de Cristo.
“Levántate, porque yo te he enviado”. Gedeón, guiado por la voluntad de Dios, lideró al pueblo israelita a la lucha contra los opresores Madianitas y, finalmente, logró liberarlos. Su fe y coraje son un ejemplo para todos nosotros, de cómo la voluntad de Dios puede manifestarse de maneras inesperadas.”